Cuando de repente sonó el teléfono....no sabía realmente si atender o no...tenía tanto miedo de escuchar su voz...
Que hacer, me preguntaba una y otra vez....
Sonaba, sonaba,SONABA, cada vez más...que siuación.
Visto desde afuera no era tan complicado, simplemente no tenía que atender y punto, o enfrentar la realidad, tomar el tuvo y decir hola...
Cuan pesado se hacía ese sonido en mi cabeza, no sonaba, golpeaba, me golpeaba la cabeza cada vez...como hacerle saber que no podía atenderlo.
como hacerle saber sin hablarle que no podía escuchar una vez más su voz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario